domingo, 28 de octubre de 2012

En el día a día a veces estamos funcionando como autómatas. Nos estamos dejando llevar todo el rato por un flujo de ideas constantes que nos vapulean a su antojo. Como si estuviéramos en los rápidos de un caudaloso río. Nos dejamos llevar y no somos dueños de nuestra propia voluntad a la hora de vivir la vida. Es como un caballo desbocado. Por eso cuando en la caminata nos paramos, nos detenemos. Cuando en la meditación, a través de nuestra atención concentración nos detenemos y dejamos de buscar nada que esté fuera de nosotros, una puerta de conexión con la realidad se abre. Empezamos a estar en contacto con la verdadera naturaleza de las cosas y las personas.
Esa luz, esa iluminación de la que hablas es la verdadera esencia de todo lo que te rodea, que al abrir una puerta dentro de ti te inunda, te llena, te penetra y es tal la claridad que puede llegar a deslumbrarte. Es la "clara luz del gozo", en palabras de un lama muy sabio.
Además de la enseñanza de "las tres joyas", de que te hable antes de la meditación, en la tradición budista hay una enseñanza que habla de las tres puertas de la liberación. Y está muy relacionada también con la práctica del otro día. La vacuidad (shunyata), la ausencia de signos (animita) y la ausencia de objetivos (apranihita). Esas son las tres puertas. Apranihita se refiere a esa paz que brinda el soltar, el dejar de buscar, el alivio que se siente al tomar conciencia de que no hay nada que hacer ni ningún lugar a donde ir. Que todo está bien. Por eso cuando te de detienes, cuando tedas a ti mismo la oportunidad de parar, como tú dices, la sensación de paz que te embarga es muy grande y muy profunda. Algo indescriptible.
Sobre la disciplina de la práctica de la meditación tengo que decir que no creo que tú y yo seamos diferentes en absoluto. El concepto que tú tienes de ti mismo es lo que te hace ver la práctica de la meditación como algo ajeno a tu vida. Pero tú eres meditación. Ya que la meditación no es más que liberarte de todo concepto y ser tú mismo. Así que en realidad no es necesario tener inquietud por practicar meditación, sino más bien no impedir que nada se interponga entre ti y tu verdadera esencia. Para meditar no hay que hacer cosas, sino más bien dejar de hacerlas.


En realidad la meditación es solo una técnica. La técnica de la no técnica. Te permite estar conectado con tu propia vida y con todos los seres que te rodean, pero no es el fin. Solo cuando traes la meditación a la vida comienzas a vivir de verdad. Así que aunque a veces la meditación exige ciertas dosis de perseverancia, es todavía más duro y trabajoso, e incluso penoso, mantener una división entre ti mismo y la realidad última de las cosas y las personas. Cuando comprendas esto no solo a un nivel intelectual sino también a un nivel mucho más profundo entonces ya no le pondrás tantas pegas a la práctica de la meditación. Y que conste que yo tampoco me paso el día meditando, pero si intento meditar sobre la vida que en realidad no es otra cosa que vivir. Vivir conscientemente. A veces lo consigo y a veces no. Como tod@s. Lo importante es intentarlo.

viernes, 5 de octubre de 2012


El sutra del corazón

(Om. Homenaje a la noble y bella perfección de la sabiduría)
El noble bodhisattva Avalokiteshvara [1] meditaba en el cauce profundo de la perfección de la sabiduría. Miró abajo y vio que los cinco skandhas [2] son vacíos y así se liberó del sufrimiento.
¡Aquí oh Shariputra! [3] la forma es vacío, el vacío es forma; la forma no difiere del vacío, el vacío no difiere de la forma; lo que sea forma, es vacío; lo que sea vacío es forma. Así también son las sensaciones, percepciones, impulsos y la consciencia.
¡Aquí oh Shariputra! todos los fenómenos son vacíos. No son producidos o aniquilados, ni impuros ni inmaculados, ni incompletos ni enteros.
Así Shariputra, en el vacío no hay forma, ni sensaciones, ni percepciones, ni impulsos, ni consciencia; no hay ojo, oído, nariz, lengua, cuerpo ni mente; no hay formas, sonidos, olores, sabores, tactos, ni objetos mentales; no hay consciencia de los sentidos.
No hay ignorancia ni extinción de ella. Ni hay todo lo que procede de la ignorancia; ni vejez, ni muerte, ni extinción de la vejez y la muerte.
No hay sufrimiento, ni su causa, ni su cese, ni sendero de liberación. No hay conocimiento, ni logros, ni falta de ellos.
Así Shariputra, el Bodhisattva, libre del apego, se apoya en la perfección de la sabiduría, y vive sin velos mentales. Así se libera del miedo con sus causas y alcanza el Nirvana.
Todos los Budas del pasado, del presente y del futuro se despiertan a la suprema y perfecta iluminación apoyándose en la perfección de la sabiduría.
Conoce que prajñápáramitá [4] es el gran mantra, [5] el mantra de gran sabiduría, el mantra más elevado, que jamas ha sido igualado y que extingue todos los sufrimientos.
Escucha la verdad infalible de prajñápáramitá:
gate gate páragate párasamgate bodhi sváhá [6]
(Así termina el corazón de la perfección de la sabiduría.)
 

Notas de la Traducción

[1]regresar al texto El bodhisattva Avalokiteshvara :: Avalokiteshvara simboliza el amor y la compasión. En este contexto los bodhisattvas son seres que buscan la Iluminación no sólo para su propio beneficio sino para el bien de todos. Avalokiteshvara no es una figura histórica sino mitológica.
[2]regresar al texto Skandhas :: Montones, agregados. Según todas las tradiciones budistas son las 5 colecciones de elementos de los cuales el ser humano no-iluminado está compuesto. Es decir forma, sensaciones, percepciones, impulsos y la consciencia.
[3]regresar al texto Shariputra :: Shariputra fue uno de los discípulos principales del Buda renombrado por su sabiduría. En su comentario sobre el sutra, Sangharákshita llama nuestra atención al simbolismo de "la compasión" dando una enseñanza a "la sabiduría". Shariputra es una figura histórica.
[4]regresar al texto Prajñápáramitá :: la perfección de la sabiduría
[5]regresar al texto Mantra :: los mantras son "sonidos simbólicos". Representan algún aspecto de la iluminación o una verdad espiritual.
[6]regresar al texto gate gate páragate párasamgate bodhi sváhá :: los mantras no se traducen dado que su importancia yace en el sonido y no en el significado de las palabras. En este caso el significado literal es: ido (de "ir"), ido, ido más allá, ido completamente más allá, iluminación, sváhá (La última palabra es prácticamente imposible de traducir: es un sonido mántrico de consagración que significa algo como "aclamación" o "que todo esté bien")


http://www.youtube.com/watch?v=xO_8j0TBGtg


http://www.youtube.com/watch?v=rBw_Jg0CggQ&feature=related